Jugar con gatos es una actividad importante para reforzar los estímulos mentales y proporcionar buena salud física y bienestar emocional, fortaleciendo el vínculo con los cuidadores. En ciertas ocasiones compramos juguetes que visualmente nos parecen llamativos, pero sin conocer el comportamiento del animal acaban eligiendo elementos sencillos como una caja de cartón para entretenerse. El juego es importante porque disminuye el estrés, también genera una conexión con la familia y/o tutor. El gato es un animal con instintos de caza y para saber como jugar con un gato debemos pensar en instrumentos que intuitivamente generen esas reacciones en él. Búsqueda de alimento, simular escenas de caza. Puede ser parte del juego con los cuidadores. Hay que evitar la frustración (en algún momento debe poder atrapar la “presa”). Si esto no es alcanzado, tendremos un redireccionamiento de su conducta con ataques a manos o tobillos de las personas presentes en su entorno. Muchas veces no sabemos si el animal está jugando con nosotros o peleando, en este artículo te explico un poco más sobre estos comportamientos dándote ideas y consejos de juegos y materiales caseros para el juego y así activar su interés. Debe disponer de juguetes que pueda acarrear. Lo ideal es ir renovando los juguetes para proporcionar novedad. Continúa leyendo estos tips.
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¿Cómo divertirme con mi gato? Importancia de jugar con tu michi y beneficios de salud y comportamiento
El juego cumple múltiples funciones esenciales en la vida de un gato. Por naturaleza, son cazadores, y aunque vivan en un ambiente doméstico, su instinto sigue siendo fuerte. A través del juego, los gatos simulan esta actividad natural, liberan energía y reducen el estrés, este último provoca el fortalecimiento de su sistema inmune.
Jugar los mantiene en forma, si no juegan lo suficiente o no tienen suficiente actividad física pueden ser propensos a la obesidad y desencadenar problemas de salud. Un gato que no juega puede desarrollar comportamientos problemáticos, como arañar muebles o morder, debido al aburrimiento.
El juego te permite fortalecer tu vínculo con tu gato. A través de estas interacciones vas construyendo confianza y complicidad haciendo que la actividad sea divertida, placentera y que ambos disfruten del tiempo juntos.
¿Cual es el juguete favorito de tu gato? Qué les gusta y qué no les atrae.
No todos los juguetes son iguales, y comprender qué estimula a un gato es clave. Los gatos son criaturas visuales, lo que significa que los juguetes que simulan el movimiento de una presa, como plumas o hilos, suelen ser los favoritos. Este tipo de estímulos activa su instinto de caza, haciéndolos más atractivos.
¿Qué no les atrae? Por experiencia, los juguetes con ruidos fuertes o movimientos demasiado bruscos no suelen ser bien recibidos (Pelotas grandes rebotando, hacer sonar squeakies sin parar etc) Recuerden, no son perros!. Los gatos prefieren la sutileza: movimientos suaves, impredecibles y controlados, que les permitan “acechar” antes de atacar. Es importante probar diferentes opciones para identificar qué prefieren.
¿Cómo jugar con un gato?: la clave está en la paciencia
No todos los gatos están dispuestos a jugar inmediatamente. La paciencia es esencial al momento de introducir un nuevo juguete o dinámica de juego. Empieza lentamente, moviendo el juguete a una distancia prudente para captar su atención.
Un truco efectivo es imitar el comportamiento de una presa: haz movimientos pequeños y erráticos, y luego una pausa. Los gatos necesitan esa pausa para prepararse y atacar. Si ves que tu gato no responde de inmediato, no te desanimes; dale tiempo para observar y comprender. Cada gato tiene su propio ritmo, y el objetivo es que se sienta cómodo y seguro antes de involucrarse activamente.
Juguetes caseros para gatos: Ideas prácticas para jugar con tu gato
No necesitas gastar mucho dinero para entretener a tu gato. Te dejo algunas ideas caseras para enriquecer el ambiente de tu gato.
Bolsas de papel o cajas: A los gatos les encanta explorar y esconderse. Puedes usar cajas de cartón con pequeños agujeros para que intenten sacar algo dentro.
Cordones o lazos: Moviéndolos suavemente, puedes captar su atención. Asegúrate de supervisar el juego para evitar que ingiera algo.
Pelotas de papel arrugado: Estas simulan presas pequeñas y son económicas y fáciles de hacer.
También se puede crear juguetes interactivos reutilizando materiales en casa, como una cuerda atada a un palo para imitar un señuelo. La creatividad puede convertir cualquier objeto cotidiano en un estímulo para tu gato. Errores comunes al jugar con los gatos (y cómo evitarlos)
Algunos errores comunes al jugar con gatos pueden frustrarlos o hacer que pierdan interés. Por ejemplo:
Forzar el juego: Si tu gato no está interesado, es mejor intentarlo más tarde. Respetar su espacio y sus tiempos es crucial.
Usar tus manos como juguetes: Esto puede llevar a comportamientos agresivos, como morder o arañar. Siempre utiliza un objeto para que persiga o ataque.
No dejar que “gane”: Es importante que el juego termine con el gato atrapando la presa (el juguete). Esto refuerza su confianza y mantiene su interés en futuras sesiones de juego.
Cómo estimular a un gato:
Estimulación física
Juega diariamente: Usa juguetes como plumeros o pelotitas para que corra, salte y cace.
Ofrece espacios para trepar: Los árboles para gatos o muebles escalables son perfectos para que puedan explorar y mantenerse activos.
Introduce circuitos caseros: Usa cajas, túneles o estructuras simples para que se divierta explorando.
Estimulación mental
Juguetes interactivos: Rompecabezas, juguetes dispensadores de comida o juegos que lo hagan pensar para obtener recompensas son ideales.
Rotación de juguetes: Cambia los juguetes semanalmente para evitar que pierda interés.
Esconde premios: Oculta snacks por la casa para que utilice su olfato y su instinto de búsqueda.
Ambiente enriquecido
Vistas al exterior: Asegúrate de que pueda observar pájaros o la actividad exterior desde una ventana. Puedes instalar perchas para gatos en los marcos de las ventanas.
Rascadores y zonas propias: Dale un lugar donde rascar y relajarse para liberar estrés y marcar territorio.
Plantas seguras: Algunas hierbas como la hierba gatera (catnip) o el pasto para gatos los estimulan y los relajan.
Socialización
Interactúa directamente: Dedica tiempo para jugar y acariciar a tu gato, respetando siempre sus límites.
Introduce un compañero: Si tu gato es sociable, otro gato puede ser una gran fuente de compañía y estimulación mutua.
Reto sensorial
Aromas nuevos: Usa esencias seguras para gatos o introduce objetos con olores distintos (ropa nueva, bolsas de tela) para estimular su curiosidad.
Sonidos suaves: Música relajante para gatos o ruidos de naturaleza pueden captar su atención y relajarlo.
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Cómo mantener el interés de tu gato: rotación y variedad en el juego
Los gatos se aburren fácilmente de los mismos estímulos, por lo que es fundamental rotar sus juguetes y mantener la variedad. Una buena práctica es guardar algunos juguetes por unos días y luego volver a introducirlos; esto les da la sensación de que son nuevos.
Además, adapta el tipo de juegos a su etapa de vida. Un gato joven necesitará actividades más activas, mientras que uno mayor podría preferir juegos más lentos. La clave es observarlo y ajustarte a sus necesidades.
Preguntas frecuentes sobre el juego con gatos
¿Cuánto tiempo al día debo jugar con mi gato?
Entre 10 y 15 minutos dos o tres veces al día suele ser suficiente. Sin embargo, algunos gatos necesitarán más tiempo, dependiendo de su nivel de energía.
¿Qué hacer si mi gato no muestra interés en los juegos?
Prueba diferentes juguetes o movimientos. Algunos gatos prefieren cazar en silencio, mientras que otros se sienten más atraídos por sonidos suaves. Si el desinterés persiste, consulta con un veterinario para descartar problemas de salud.
¿Porqué a los gatos les gusta jugar con pelotas?
A los gatos les encanta jugar con pelotas pequeñas porque les despiertan sus instintos naturales de caza. Las pelotas se mueven rápido, ruedan de forma impredecible y son lo suficientemente pequeñas como para simular el tamaño de una presa, como un ratón o un insecto. Esto activa el instinto felino de acechar, perseguir y atrapar.
Jugar con tu gato es mucho más que diversión: es una forma de fortalecer su salud física, estimular su mente y estrechar el vínculo entre ambos. Recuerda que la paciencia y la observación son tus mejores aliadas para descubrir qué juegos y dinámicas funcionan mejor.
Con un poco de creatividad y dedicación, transformarás el tiempo de juego en un momento especial que los hará feliz a ambos. ¡Así que no esperes más y empieza a jugar con tu michii!!
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